Financiar una start up, qué alternativas son más adecuadas
En muchas ocasiones, financiar una start up es el proceso más complejo a la hora de comenzar un proyecto de este tipo. Existen diversas alternativas, pero es preciso saber su alcance y las implicaciones de cada decisión.
Qué es una startup
Una startup es una empresa joven de base tecnológica, caracterizada por su gran potencial de crecimiento y modelo de negocio escalable.
Estas empresas buscan explotar nichos de mercado innovadores y ofrecer soluciones disruptivas.
La naturaleza de una startup es su agilidad y adaptabilidad, diferenciándose de las empresas tradicionales por su capacidad de escalar rápidamente y su enfoque en la innovación constante.
Para crear una startup en España, los pasos iniciales incluyen definir una idea de negocio clara y viable, realizar un estudio de mercado y elaborar un plan de negocio detallado.
Es fundamental determinar la estructura legal de la empresa, comúnmente como sociedad limitada por su flexibilidad y limitación de responsabilidad.
A continuación, se debe registrar la empresa en el Registro Mercantil, obtener el CIF y darse de alta en la Seguridad Social y Hacienda.
Si te interesa conocer en detalle cómo se crea una start up en España, en este enlace puedes saber más acerca del proceso.
Alternativas e ideas para financiar una start up
La búsqueda de capital es esencial para desarrollar el producto, entrar al mercado y escalar el negocio.
Existen múltiples vías para obtener financiación, cada una con sus ventajas y desventajas, dependiendo de la etapa de desarrollo en la que se encuentre la startup y la naturaleza del negocio.
A continuación, analizamos las principales vías de financiación para una startup:
- Autofinanciación o bootstrapping: Consiste en financiar el proyecto con recursos propios, evitando así endeudarse o ceder parte del control a terceros. Esto puede incluir ahorros personales, venta de activos o reinversión de ganancias de la propia empresa.
- Amigos y familia: A menudo, los emprendedores recurren a préstamos o inversiones de personas cercanas que creen en el proyecto y están dispuestos a apoyarlo financieramente.
- Créditos bancarios: Obtener préstamos de bancos o instituciones financieras. Requiere de un buen plan de negocios y, frecuentemente, garantías.
- Subvenciones y ayudas gubernamentales: Algunos gobiernos, ya sea a nivel estatal o autonómico, ofrecen apoyos económicos, subvenciones o incentivos fiscales para fomentar la innovación y el emprendimiento.
- Crowdfunding: Utilización de plataformas en línea para obtener pequeñas cantidades de dinero de un gran número de personas. Este método no solo proporciona financiación, sino que también valida la idea de negocio ante un público amplio.
- Venture Capital (VC): Fondos de inversión que aportan grandes cantidades de dinero a startups con alto potencial de crecimiento. A cambio, suelen requerir una participación significativa en el negocio y posiciones en el consejo de administración.
- Incubadoras y aceleradoras: Programas que ofrecen no solo financiación, sino también espacio de oficina, asesoramiento y acceso a una red de contactos. Están diseñados para ayudar a las startups en sus etapas iniciales a desarrollarse rápidamente.
- Préstamos P2P (Peer to Peer): Plataformas que permiten obtener préstamos directamente de otros inversores, eliminando a las instituciones financieras como intermediarios.
- Ferias corporativas y concursos de emprendimiento: Participar en estos eventos puede proporcionar no solo financiación, sino también visibilidad y retroalimentación sobre el plan de negocios.
- Tokenización): Para startups de base tecnológica, especialmente aquellas relacionadas con blockchain, vender tokens puede ser una forma innovadora de recaudar fondos.
La presión fiscal relativa a la financiación de start ups
En España, el pago de impuestos durante las primeras etapas de formación de una start up puede influir significativamente en la decisión de emprendedores e inversores.
Actualmente, existen varios incentivos fiscales destinados a fomentar la inversión en empresas de nueva creación, por ejemplo, los inversores privados pueden beneficiarse de reducciones en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) por la inversión en startups, con un límite establecido en la legislación vigente.
Además, las startups pueden disfrutar de tipos impositivos reducidos en el Impuesto de Sociedades durante los primeros años tras su constitución, siempre que cumplan ciertos requisitos, como no superar ciertos límites de facturación.
También existen deducciones por actividades de I+D+i que pueden ser particularmente relevantes para startups tecnológicas.
Sin embargo, a pesar de estos incentivos, la carga administrativa y la complejidad del sistema fiscal pueden representar un desafío.
Es importante que las startups se asesoren adecuadamente para maximizar los beneficios fiscales disponibles y minimizar su presión fiscal global, tanto a corto como a largo plazo.
La planificación fiscal y financiera es crucial para aprovechar al máximo los incentivos ofrecidos y sostener el crecimiento del negocio en el competitivo mercado español.
En Asesoría Orihuela Costa te ofrecemos el mejor asesoramiento, con un equipo financiero y fiscal especializado en la creación de start ups desde sus etapas iniciales.
Si tienes un proyecto y quieres protegerlo, ponte en contacto con nuestro equipo y potencia tu negocio desde el principio.
