ERTE: Guía Completa para Entender su Funcionamiento en España
Patrick Gordinne Perez2025-01-03T02:52:57+00:00Tabla de contenido
El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) es una fórmula que permite a las empresas cancelar temporalmente los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus trabajadores.
Este mecanismo se ha utilizado especialmente en situaciones de crisis económica. Si, en la pandemia del covid también.
Los ERTE están regulados en el artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores y pueden clasificarse en diferentes tipos según las causas que los motivan.
Su implementación busca mitigar los efectos negativos de las crisis en el empleo y la economía.
En este artículo vamos a ver lo que es un ERTE, como se aplica, tipos de Ertes, diferencias con los EREs, ventajas y desventajas para trabajadores y empresa y las últimas novedades reglamentarias
Vamos a entrar en materia y empezamos por el principio.
¿Qué es un ERTE y cómo funciona?
El ERTE es una herramienta o sistema relevante en el ámbito laboral que permite a las empresas regular temporalmente el empleo de sus trabajadores en situaciones excepcionales.
Este mecanismo puede ser determinante para salvaguardar la continuidad del empleo en contextos de crisis.
Definición de ERTE
El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) es un procedimiento que las empresas pueden implementar para suspender de forma temporal los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados.
Este recurso se utiliza comúnmente en situaciones de crisis económicas o imprevistos que afectan la actividad normal de la empresa, permitiendo una adaptación a las circunstancias sin que ello conlleve despidos definitivos.
Regulación temporal del empleo
El ERTE se encuentra regulado, principalmente, en el artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores, así como en diversas normativas adicionales que han ido surgiendo, especialmente en el contexto de crisis generadas por la pandemia.
Su gestión implica diversos aspectos legales que deben cumplirse para poder ser efectivo. Las empresas deben demostrar la justificación del ERTE, ya sea por motivos de fuerza mayor o por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción.
Procedimiento para solicitar un ERTE
El proceso para llevar a cabo la solicitud de un ERTE consta de varias etapas que deben ser meticulosamente ejecutadas para asegurar su legalidad.
Este constituye un aspecto crucial en la implementación exitosa de este recurso.
Documentación necesaria
Las empresas deben reunir y presentar documentación específica para solicitar un ERTE.
Entre esta, se incluyen informes económicos, documentación sobre la situación laboral de la empresa y cualquier otro documento que respalde la necesidad del mismo.
Es fundamental que toda la información presentada sea clara y precisa para evitar inconvenientes en la gestión del proceso.
Presentación de la solicitud
Una vez recopilados todos los documentos necesarios, la empresa debe presentar formalmente la solicitud ante la autoridad laboral correspondiente.
Este trámite incluye la notificación a los representantes de los trabajadores y, en muchos casos, la realización de una negociación para llegar a un acuerdo sobre las condiciones del ERTE.
Resolución de la Autoridad Laboral
Tras la presentación de la solicitud, corresponde a la Autoridad Laboral examinarla y emitir una resolución.
El plazo de resolución puede variar dependiendo de las circunstancias y la cantidad de solicitudes recibidas.
Si la solicitud es aprobada, se dará inicio al periodo de regulación temporal tal como se ha especificado en la petición presentada.
ERTE y la regulación estatal
La regulación estatal juega un papel fundamental en la gestión de los ERTE.
Durante situaciones excepcionales, como la crisis ocasionada por la COVID-19, el gobierno ha implementado medidas que facilitan la aplicación de ERTE, flexibilizando procedimientos y requisitos.
Estas regulaciones buscan proteger tanto a trabajadores como a empresas, y garantizar una recuperación económica más ágil
Tipos de ERTE
Los ERTE se clasifican en diferentes categorías según las circunstancias y causas que los motivan.
Cada tipo tiene características específicas que determinan su regulación y aplicación en las empresas.
ERTE por fuerza mayor
Este tipo de ERTE se activa cuando la empresa se ve obligada a paralizar su actividad debido a causas ajenas a su voluntad.
Ejemplos de fuerza mayor incluyen situaciones extraordinarias como catástrofes naturales, crisis sanitarias, o cualquier circunstancia que impida el normal desarrollo de la actividad laboral.
La gestión de este ERTE suele ser más ágil y simplificada.
El proceso de solicitud en situaciones de fuerza mayor permite que las empresas minimicen el impacto inmediato en su plantilla, ya que los trabajadores pueden beneficiarse de prestaciones por desempleo, manteniendo así su puesto de trabajo de manera temporal.
ERTE por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción (ETOP)
En contraste con el ERTE por fuerza mayor, esta categoría requiere que la empresa justifique detalladamente las razones que motivan la suspensión o reducción de la jornada laboral.
Existen varios factores que pueden utilizarse como justificación.
Detalles sobre causas económicas
Las causas económicas pueden referirse a situaciones en las que la empresa sufre una disminución de ingresos, pérdidas económicas o cualquier otro factor que afecte su viabilidad financiera.
Es necesario presentar pruebas que demuestren cómo la situación económica afecta a la empresa y a su capacidad para mantener el empleo.
Causas técnicas y organizativas
Por otro lado, las causas técnicas y organizativas se refieren a cambios dentro de la empresa que afectan la producción o la organización interna.
Esto puede incluir la reorganización de procesos, cambios tecnológicos o ajustes en la forma de trabajar que justifiquen la necesidad de suspender contratos o reducir jornadas.
Es esencial que la empresa documente de manera adecuada todos estos aspectos para que su solicitud de ERTE sea considerada válida.
Este tipo de ERTE busca ajustar el funcionamiento interno de la empresa sin perder definitivamente a su personal, permitiendo una reincorporación una vez superadas las dificultades.
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Leer másDiferencias entre ERTE y ERE
La comprensión de los mecanismos de regulación de empleo en España es esencial para cualquier análisis del mercado laboral actual.
Dos de los términos más utilizados en este contexto son ERTE y ERE, que aunque están relacionados, tienen propósitos y procedimientos distintos.
Definición de ERE
El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) se refiere a un procedimiento legal mediante el cual una empresa puede despedir de forma definitiva a uno o varios trabajadores.
A diferencia de un ERTE, que busca mantener el empleo temporalmente, el ERE implica una reducción permanente del personal.
Este mecanismo se activa cuando una empresa enfrenta dificultades económicas severas y necesita realizar ajustes estructurales en su plantilla laboral.
Comparativa: ERTE vs ERE
La principal diferencia entre ambos procedimientos radica en su naturaleza y propósito. Mientras que el ERTE es una medida temporal destinada a la suspensión o reducción de jornada laboral, el ERE conduce a despidos definitivos. A continuación, se presentan algunos aspectos comparativos clave:
- El Objetivo de ambos:
- El ERTE busca mantener el empleo temporalmente.
- El ERE se utiliza para realizar despidos permanentes.
- Duración:
- ERTE tiene una duración limitada y es revisable.
- ERE implica una terminación irreversible del contrato laboral.
- Procedimiento:
- El ERTE requiere comunicación y negociación con los representantes de los trabajadores, siendo más ágil en su aprobación.
- El ERE requiere un proceso más formal y complejo, con justificaciones detalladas de las causas económicas que lo motivan.
Impacto para trabajadores y empresas
El impacto de un ERTE y un ERE difiere considerablemente. En el caso de un ERTE, los trabajadores mantienen su empleo, aunque con reducción de jornada o salario durante el periodo de aplicación.
Esto ofrece cierta seguridad, ya que se espera una reincorporación a sus puestos una vez superada la crisis que motivó la regulación.
Sin embargo, también puede generar incertidumbre debido a la temporalidad de la situación.
En contraste, un ERE supone una pérdida definitiva del puesto de trabajo, lo que genera un impacto emocional y económico más severo para los afectados.
Esta diferencia también se refleja en las empresas; mientras que un ERTE permite ajustar temporalmente los costes laborales, un ERE implica un cambio estructural que puede afectar la operativa y la cultura organizativa a largo plazo.
Beneficios y desventajas del ERTE para los trabajadores
La aplicación de un ERTE puede tener efectos importantes en la vida laboral de los trabajadores.
Si bien esta herramienta responde a la necesidad de las empresas de reducir costos en tiempos de crisis, también conlleva tanto ventajas como desventajas que afectan a los empleados de diversas maneras.
Mantenimiento del empleo
Una de las principales ventajas del ERTE es que permite la continuidad del empleo para muchos trabajadores.
En lugar de enfrentarse a un despido definitivo, los empleados tienen la posibilidad de conservar su puesto de trabajo, lo que contribuye a su estabilidad laboral.
Esta característica es especialmente relevante en contextos económicos críticos, donde las opciones de empleo son limitadas.
Acceso a prestaciones por desempleo
Los trabajadores incluidos en un ERTE tienen derecho a recibir prestaciones por desempleo, lo que les proporciona un apoyo económico temporal.
Este aspecto es fundamental para garantizar un mínimo de ingresos durante los periodos de suspensión o reducción de jornada.
La posibilidad de acceder a esta prestación ayuda a mitigarlos efectos económicos adversos que podrían resultar de la pérdida total del empleo.
Reincorporación laboral
Al finalizar el ERTE, los trabajadores suelen tener la oportunidad de reincorporarse a sus puestos de trabajo.
Esta continuidad en el empleo es un aspecto que favorece la estabilidad personal y familiar.
La posibilidad de volver a su trabajo anterior se traduce en una mayor seguridad y planificación a corto y medio plazo.
Reducción de ingresos
A pesar de los beneficios mencionados, el ERTE también conlleva desventajas significativas, entre las que destaca la reducción de ingresos.
Durante la duración del ERTE, los salarios se ven afectados, y esto puede causar inconvenientes en la economía personal de los trabajadores.
Las reducciones salariales pueden impactar negativamente en su capacidad para afrontar gastos cotidianos.
Incertidumbre laboral
Otro aspecto que genera preocupación es la incertidumbre laboral.
La naturaleza temporal de un ERTE puede provocar inquietud sobre la estabilidad a largo plazo del empleo.
Los trabajadores, aunque mantengan su puesto, pueden experimentar ansiedad acerca del futuro, especialmente en un entorno económico incierto y cambiante.
Beneficios y desafíos del ERTE para las empresas
El ERTE proporciona una válvula de escape para las empresas en momentos de crisis, permitiendo gestionar su plantilla de manera eficiente.
A continuación, se exponen los beneficios y desafíos que este mecanismo representa para las organizaciones.
Flexibilidad financiera
La aplicación de un ERTE permite a las empresas ajustar sus gastos laborales en periodos de crisis o baja actividad.
Esta flexibilidad financiera resulta crucial para la supervivencia de muchos negocios.
Al reducir la carga salarial temporalmente, las empresas pueden destinar recursos a otras áreas críticas, lo que les ayuda a mejorar su situación económica.
Este tipo de flexibilidad incluye:
- Reducción de costes fijos: Al suspender temporalmente los contratos de trabajo, se generan importantes ahorros en nómina y otras cargas laborales.
- Mantenimiento de la liquidez: Disminuir los gastos permite a las empresas conservar recursos para hacer frente a otros compromisos financieros.
- Posibilidad de reinversión: Con menor presión económica, las empresas pueden replantear sus estrategias y reinvertir en áreas estratégicas para su crecimiento.
Mantenimiento del capital humano
Una de las mayores ventajas del ERTE es la posibilidad de preservar el talento humano de las organizaciones.
Al optar por esta modalidad, las empresas evitan despidos definitivos y mantienen intacto su capital humano, lo cual es fundamental para una rápida recuperación tras la crisis.
Los aspectos relevantes en este sentido son:
- Conservación del conocimiento: Los empleados con experiencia y habilidades específicas son fundamentales para la continuidad operacional de la empresa.
- Continuidad en la cultura organizacional: El ERTE ayuda a mantener la cohesión del equipo y los valores de la empresa durante situaciones adversas.
- Facilidad para la reactivación: Al volver a la actividad, reintegrar a los mismos empleados permite una transición más rápida y eficiente.
Desafíos en la comunicación y negociación
A pesar de los beneficios, la implementación de un ERTE presenta varios desafíos que las empresas deben manejar.
La comunicación efectiva y la negociación con los trabajadores son elementos cruciales que pueden influir en el éxito del proceso.
Entre los principales desafíos se encuentran:
Gestión de expectativas:
Es fundamental que los trabajadores comprendan el motivo del ERTE y las implicaciones del mismo para evitar tensiones en el ambiente laboral.
Negociaciones complejas:
La empresa debe negociar con los representantes de los trabajadores, lo que puede generar conflictos si las partes no cuentan con un canal de comunicación claro.
Impacto en la moral del equipo:
La incertidumbre generada por la reducción de jornada o la suspensión temporal puede afectar la motivación de los empleados, por lo que las empresas deben ser proactivas en el mantenimiento del espíritu de equipo.
ERTEs: ultimas novedades
La regulación de los ERTE se modificó de forma transitoria durante el COVID.
No obstante, con posterioridad se han introducido algunas novedades que han pasado desapercibidas. Descubra cuáles son…
Modificaciones de los ERTEs
Durante la pandemia se aprobaron reales decretos leyes que establecían, con carácter transitorio, modificaciones y novedades sobre la aplicación de los ERTE (de suspensión de contratos o de reducción de jornada).
No obstante, algunas de esas novedades (como el ERTE por impedimento o limitación de actividad o el Mecanismo RED) se han acabado regulando con carácter permanente, además de introducirse otros cambios.
Véalos a continuación.
Inspección de Trabajo
El empresario y los trabajadores afectados por el ERTE tienen derecho a acceder al expediente administrativo de la Autoridad Laboral.
Además, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social debe realizar un informe y remitírselo.
Reducción de jornada
En caso de reducción de jornada, si ésta está fijada en términos diarios, deberá reducirla unas horas al día.
En cambio, si está fijada en términos semanales, mensuales o anuales, podrá reducirla unas horas al día o bien en jornadas completas.
Por ejemplo, si un trabajador tiene un contrato en el que se acuerda la realización de 120 horas al mes, será posible reducirlas a 60, pero concentrándolas durante las dos primeras semanas del mes –sin reducir el número de horas al día–.
Prioridad en el ERTE
Se debe priorizar la reducción de jornada a la suspensión del contrato.
Además, un empleado sólo podrá afectarse a una medida de reducción de jornada o de suspensión de contrato, sin que sea posible la combinación de ambas.
No obstante, sí se permite la afectación o desafectación o la variación en el porcentaje de reducción cuando se altere la causa justificativa del ERTE y por tanto las necesidades de la empresa.
Ejemplo de priorizar la reducción de jornada
Si usted suspende el contrato de un trabajador los lunes, miércoles y viernes, no podrá también reducir su jornada al 50% durante los martes y jueves.
No obstante, sí podrá transitar de una medida a otra, e incluso modificar el porcentaje de reducción del 50 al 60 o al 30%.
Afectaciones
Durante el ERTE es posible afectar y desafectar a los trabajadores cuando varíen las causas justificativas de la medida.
En todo caso, es necesario informar previamente a la representación legal de los trabajadores, a la Tesorería General de la Seguridad Social y al SEPE.
La normativa le obliga a informarles, pero sin necesidad de obtener su autorización o beneplácito.
Entre las novedades de los últimos años respecto a los ERTE destacan la posibilidad de acumular la reducción de jornada en jornadas completas y la variación del porcentaje de reducción según las necesidades.
Acciones formativas de un ERTE
ERTE formativos
En 2021 el crédito de formación bonificada disponible para las empresas en ERTE se amplió sustancialmente.
Entendiendo la situación de dificultad de estas empresas, se incrementaron las cuantías del crédito y, además, se estableció que cualquier empleado en ERTE tenía derecho a este tipo de formación.
Formación
Por tanto, la empresa debe ofrecer formación bonificada a todos los trabajadores afectados por el ERTE.
Dichas acciones formativas pueden ir dirigidas a la re-calificación de los empleados aunque no tengan relación directa con la actividad que desarrollan en la empresa.
En todo caso, deberán desarrollarse antes de que transcurran seis meses desde la finalización del período de vigencia del ERTE.
Además, deberán respetarse los descansos legalmente establecidos y el derecho a la conciliación de la vida laboral, personal y familiar, debiendo transcurrir 12 horas entre las jornadas formativas y mediando un descanso mínimo semanal de un día y medio ininterrumpido.
Preguntas frecuentes sobre los ERTE
El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) ha generado diversas inquietudes entre trabajadores y empresas.
A continuación se responden algunas preguntas comunes relacionadas con este instrumento laboral.
¿Puedo negarme a entrar en un ERTE?
La negativa a participar en un ERTE depende de varios factores.
En general, los trabajadores no pueden rechazar individualmente la inclusión en un ERTE si ha sido aprobado y justificado por la empresa, siempre que se sigan las normativas laborales previstas.
Sin embargo, es posible plantear la oposición a través de los representantes legales, especialmente si se considera que no se cumplen las condiciones necesarias.
Estas decisiones deben ser comunicadas formalmente y pueden ser objeto de negociación.
¿Cómo afecta el ERTE a la prestación por desempleo?
La inclusión en un ERTE permite a los trabajadores acceder a la prestación por desempleo.
Durante el tiempo que el trabajador permanezca en esta situación, podrá recibir una compensación económica, que será equivalente a un porcentaje del salario.
Cabe recordar que estos días de percepción de la prestación se descontarán del total de días que se tengan derecho en caso de un despido posterior.
Esto significa que, si bien se recibe apoyo económico, se estará utilizando parte del tiempo de prestación que podría ser necesario en el futuro.
¿Qué ocurre al finalizar el ERTE?
Una vez concluido el período del ERTE, los trabajadores tienen derecho a reincorporarse a sus puestos de trabajo.
La empresa está obligada a restablecer las condiciones de trabajo existentes antes de la entrada en el ERTE, así como a permitir la vuelta a la normalidad en la jornada laboral.
Sin embargo, en algunas ocasiones pueden surgir complicaciones, como la necesidad de readaptación de funciones o cambios en la organización.
Los trabajadores deberán estar atentos a la comunicación de la empresa sobre las condiciones de su reincorporación.
Trámites y documentación para los trabajadores
Para poder beneficiarse de un ERTE, es fundamental que los trabajadores conozcan los trámites y la documentación necesaria.
Los pasos típicos incluyen:
- Recibir información de la empresa sobre el ERTE aprobado y sus condiciones específicas.
- Preparar la documentación solicitada, que puede incluir el DNI, número de afiliación a la Seguridad Social y un formulario que acredite la situación laboral.
- Reclamar la prestación por desempleo en la oficina del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) o a través de la plataforma en línea, cumpliendo con los plazos establecidos por la normativa vigente.
- Estar atentos a la posible necesidad de consultas periódicas con el SEPE para resolver cualquier duda sobre el estado de la solicitud o el percibo de prestaciones.
Estos trámites son esenciales para asegurar que los derechos de los trabajadores sean respetados durante el proceso de ERTE y para garantizar el acceso a las ayudas económicas pertinentes.