Sugerencias para evitar tener problemas para pagar el Iva modelo 303
Los expertos fiscales señalan que el IVA del modelo 303 no es un impuesto que tienen que pagar los empresarios, sino que éstos, son meros intermediarios y recaudadores de Hacienda. Vamos, que somos meros recaudadores pero no cobramos . Inteligente no?
Sin embargo, es cierto que los autónomos y empresas pueden encontrarse a menudo con problemas de liquidez a la hora de pagar el IVA trimestralmente porque se han gastado ese Iva que tienen que ingresar en Hacienda cada trimestre.
Todos sabemos que gastar un dinero que no es tuyo te va a suponer problemas más tardes. Pero acaso no es lo que hacen los bancos?
Los gestores de fondos también lo hacen.
Incluso los políticos lo hacen.
Principal problema a la hora de pagar el Iva modelo 303
Uno de los principales problemas a los que se enfrentan los autónomos o empresarios es la gestión financiera del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA). Somos humanos, el cerebro se cree que somos ricos si tenemos muchos dinero en la cuenta. Pero ese dinero no es nuestro.
En efecto, muchos clientes nos dicen que trabajan para pagar a hacienda o que un dia tienen mucho dinero en la cuenta y cuando llegan los impuestos, la tienen vacía. Si eres empresari@ hace años sabes de lo que hablo.
Es por ello que siempre hay que mantener los pies en el suelo para evitar problemas que impidan desembolsar las cantidades del impuesto que previamente hemos cobrado y que hemos declarado en el modelo 303. Como dicen la serie aquí no hay quien viva «Mente Fria».
Los expertos fiscales insisten que el IVA no es un impuesto que deben pagar los autónomos (Y tienen razón), sino que el autónomo es simplemente un intermediario y/o recaudador a través del cual Hacienda cobra el Iva de las facturas que emite el autónomo ( se llama Iva repercutido), ya que es el cliente del empresario quien paga el impuesto.
Los autónomos también pagan el IVA cuando compran bienes o encargan la prestación de servicios a terceros y pueden deducirse ese Iva ( se llama Iva Deducible).
Para entender cómo funciona este impuesto y su repercusión en la liquidez de las cuentas de una empresa o del autónomo, hay que saber que todo autónomo o empresario trabaja con dos tipos de Iva diferentes: como empresario, vende productos y/o ofrece la prestación de servicios y cobra el impuesto pagado por sus clientes (IVA devengado o repercutido), pero también adquiere otros productos y/o servicios necesarios para desarrollar su actividad (IVA deducible o soportado).
El resultado del Iva que se declarara trimestralmente a través del modelo 303 será la diferencia entre ambos IVAs. Si la diferencia es positiva, el modelo 303, será a pagar y si es negativo será a compensar o devolver (se pide la devolución en el cuarto trimestre).
(IVA devengado o repercutido) – (IVA deducible o soportado) = Si es positivo , el IVa es a pagar ; si es negativo el Iva sale a compensar.
¿Que significa el IVA sale a compensar?
Como el Iva se presenta, normalmente, cada trimestre; si un trimestre el resultado del Iva sale negativo. Este Iva no se devuelve sino que se compensa con el trimestre siguiente.
Como recaudador o cobrador temporal del IVA (IVA devengado o repercutido), el principal consejo que le dan todos los expertos es que nunca se gaste el IVA que ha cobrado en sus facturas.
A veces es difícil no hacerlo porque, como hemos dicho antes, el cerebro se engaña a sí mismo, y cree que todo lo que tenemos es nuestros. O bien pensamos que si invierto por aqui, lo recuperare rapidamente por alla.
Pero si gasta el IVA cobrado, tendrá que pagarlo de otra manera, porque hacienda no perdona ( Ya sabemos el dicho que Hacienda es como el monstruo de las galletas) y exigirá de una manera o de otra que se pague puntualmente cada trimestre. Si no paga a tiempo, deberá hacer frente a recargos, intereses y sanciones.
Sin embargo, también hay algunas maneras que los empresarios pueden tener en cuenta para evitar problemas de tesorería a la hora de pagar el IVA.
Tener otra cuenta bancaria para el IVA
Tradicionalmente, el método más recomendable y sencillo para un negocio que no requiere demasiado papeleo, y es tener dos cuentas.
Una para los pagos y cobros diarios y otra para guardar el Iva de lo cobrado. También puede tener en esa segunda cuenta las retenciones o los impuestos sobre el beneficio.
Tendrá que transferir el Iva cobrado a la cuenta del Iva. Es cierto que su cash-flow se verá mermado ( porque en esa cuenta tendrá dinero de mas, pero considerelo como ahorro) pero es un precio que hay que pagar para evitar sustos con hacienda.
Si tiene dos cuentas separadas y la cuenta del IVA no se toca, no debería tener problemas a la hora de pagar el IVA con Hacienda.
Pero existen otros trucos para gestionar correctamente el IVA. Los autónomos que se embarcan en una actividad por cuenta propia deben tener en cuenta que, para cumplimentar correctamente esta declaración fiscal, es necesario disponer de un sistema de contabilidad y llevar un registro de facturas, que también son necesarias para justificar las posibles deducciones fiscales.
Mantener la contabilidad al día es esencial
El desorden de facturas nunca es bueno e, increíblemente, muchas empresas son bastante anárquicas cuando se trata de gestionar sus facturas y sus cuentas.
A veces, las facturas se amontonan en archivos o cajones hasta que llega el momento de la declaración trimestral. Patrick Gordinne Perez, fundador de Asesoría Orihuela Costa , insiste en que la primera clave para una buena gestión es «llevar una correcta contabilidad de las facturas, lo que permitirá gestionar correctamente los pagos del IVA«.
Es necesario contabilizar las facturas a diario, para lo que existen programas específicos de contabilidad o facturación.
Las dos opciones más habituales para cumplir este requisito son «contratar a un asesor contable y fiscal o adquirir un programa de facturación, que automatiza el trabajo, evita errores de contabilidad manual y ahorra tiempo».
Con Asesoria Orihuela Costa tendrá los dos requisitos en uno
¿Qué gastos son deducibles en el IVA?
Una de las condiciones fundamentales para poder deducir los gastos es que estén correctamente registrados en la contabilidad y puedan justificarse mediante un documento físico legal, como una factura.
Saber qué gastos pueden y no pueden deducirse a efectos del IVA
También es esencial conocer los factores que afectan a la deducibilidad del IVA. Normalmente, las deducciones se realizan en la declaración de la renta del periodo contable correspondiente al momento en el que el autónomo soportó el IVA a deducir, aunque existe un margen de hasta cuatro años desde la emisión de la factura.
Además, como señala González Rivas, la deducción de gastos relacionados con el desarrollo de la actividad sólo será válida ante Hacienda si son totalmente necesarios para el desarrollo de la actividad; entre ellos se incluyen «los gastos de funcionamiento (equipos), arrendamientos del local donde se desarrolla la actividad, impuestos deducibles o servicios profesionales imprescindibles para la realización de los trabajos de que se trate», pero deben «cumplir los requisitos establecidos para que no se deduzcan incorrectamente» y para evitar posibles sanciones futuras de Hacienda.
Aplazamiento del Iva modelo 303
Aplazar el pago del IVA es posible
Una tercera opción es solicitar un aplazamiento del pago del impuesto si no podemos pagarlo en la fecha prevista. Una alternativa es solicitar un aplazamiento a la Agencia Tributaria, utilizando el formulario 303, dentro del plazo correspondiente al momento de la autoliquidación. Para realizar este tipo de solicitud, el autónomo debe disponer de la documentación actualizada.
Este aplazamiento está sujeto a un tipo de interés y para su aprobación, el empresario debe acreditar la imposibilidad de hacer frente al pago, con un plazo de 10 días para presentar los documentos que falten. Esta alternativa permite aplazar las deudas inferiores a 50.000 euros durante 24 meses ( las personas físicas) y 12 meses ( las personas jurídicas) sin necesidad de justificar el impago de las facturas ni aportar una garantía.
Tener una póliza de crédito
Abrir una línea de crédito para disponer de efectivo para pagar los impuestos.
La mayoría de los bancos ofrecen líneas de crédito para que los autónomos y las pequeñas empresas dispongan de efectivo que, por supuesto, puede utilizarse para pagar impuestos. Las condiciones y características difieren algo de un banco a otro, pero en general se trata de una cantidad que el banco pone a disposición de la empresa y que el autónomo puede utilizar cuando lo necesite.
De hecho en los últimos tiempos la mayoría de bancos dan préstamos rápidos para pagar los impuestos
Por otro lado, existen las líneas del Instituto de Crédito Oficial.
Se trata de un conjunto de «instrumentos financieros incluidos en las Líneas ICO de Mediación» dentro del modelo de colaboración público-privada, que financian la actividad de autónomos, pymes y emprendedores de todos los sectores. Esto incluye «la financiación de liquidez para actividades empresariales», según recoge el ICO.
Para acceder a estas líneas de crédito, los interesados deben acudir a una de las entidades colaboradoras y presentar una solicitud.
El proceso se facilita a los empresarios mediante asesoramiento, ya que «cuenta con una red de agentes colaboradores» formada por asociaciones empresariales, cámaras de comercio, etc., a los que pueden solicitar esta guía «para ayudarles en el proceso de solicitud».
La característica básica de estas líneas es que son un «producto sencillo»; están compuestas por la Línea ICO Empresas y Emprendedores, para facilitar la tramitación y la financiación a largo plazo, y la Línea ICO Crédito Comercial, que complementa a la primera para anticipos y descuentos de facturas y financiación a corto plazo, según el ICO.
Para llevar a cabo estos planes, el tipo de interés varía en función del plazo por el que el autónomo contrate la operación, pero «ICO establece una TAE máxima en función del plazo».
La relación contractual del ICO se establece con los bancos y cooperativas adheridos al sistema de mediación, así como con las asociaciones y entidades que distribuyen gratuitamente las líneas del ICO, entre las que se encuentran la Confederación Española de Comercio e Industria, la Unión Europea y la Unión Europea.
Entre ellas, la Confederación Española de Comercio, las agencias de comunicación españolas, la Unión Profesional, el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial y diversas federaciones empresariales de las comunidades autónomas españolas.
