Autónomo: actualiza tu CNAE‑25 antes del 30 junio
Actualizar el CNAE-25, si procede, es una obligación que tienen los autónomos antes del 30 de junio. En este artículo, te explicamos el porqué y las consecuencias de no hacerlo.
Qué es el CNAE-25
El código CNAE (Clasificación Nacional de Actividades Económicas) es un número que identifica y clasifica tu actividad profesional en un ramo determinado.
Contiene 4 dígitos y es obligatorio identificarte cuando das de alta una empresa en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).
Se utiliza para finalidades estadísticas.
¿Qué sucede? Ese código no implica necesariamente un pago, porque la inmensa mayoría de los autónomos estarán exentos de pagar el IAE por sus volúmenes de facturación o por las políticas que implemente el municipio. Por eso, es relativamente común que, una vez hecha la declaración censal, esta cuestión se olvide.
El modelo 036 se tiene que presentar cuando se abre el negocio, sí. Pero también toca notificar cambios en el negocio, y ahí es donde entran los cambios del CNAE.
¿Por qué puede haber cambiado tu CNAE-25?
Actualizar el CNAE-25 se puede hacer necesario porque este año ha entrado en vigor una nueva nomenclatura. Hasta ahora, estaba vigente el CNAE-09, puesto que la última clasificación databa de 2009. Y, en este caso, se han añadido nuevas profesiones y simplificado algunos apartados. Estos son los principales cambios:
- Incorporación de nuevas actividades: han aparecido nuevas actividades profesionales que antes no estaban incluidas. En este caso, habrá que hacer una reasignación. Hay que pensar que, en 16 años, han aparecido nuevas casuísticas que exigen clasificaciones distintas.
- Desglose en las actividades: en algunos casos, había actividades con un único CNAE que ahora se han desglosado para representar fielmente la realidad. Por ejemplo, han aparecido nuevas clases en las actividades de intermediación o la industria manufacturera. Otro tanto sucede en la división J, que se desglosa en dos nuevas.
- Reasignación de actividades: en determinados grupos, hay una reasignación de actividades, ya sea para agrupar o para simplificar. Esto sucede, por ejemplo, en el grupo 35. En algunos casos, es simplificación, en otras, una cuestión más compleja. Por eso se debe consultar.
No obstante, ¿siempre se tendría que comunicar ese cambio? La respuesta es que no, siempre que el CNAE-2025 corresponda con el CNAE-2009. Si esto sucede, y es algo bastante habitual, la Seguridad Social realiza de oficio el cambio. En cualquier caso, si tienes un negocio de antes, deberías revisar para hacer los cambios que toquen antes del 30 de junio.
Actualizar el CNAE-25: las consecuencias de no hacerlo
La no actualización del CNAE-25 puede traer una serie de problemas, sobre todo a medio y largo plazo. Estas son las principales consecuencias de una nomenclatura incorrecta:
1. Problemas de identificación
En primer lugar, y aunque el CNAE-25 tiene una finalidad estadística, puede traer problemas a efectos de identificación con la Seguridad Social. Esto es más importante, si cabe, cuando hablamos de una empresa que tiene trabajadores por cuenta ajena. A veces, por una identificación incorrecta puedes no recibir una notificación que te correspondería, con el consecuente problema.
2. Posibles sanciones
Una clasificación incorrecta de la actividad abre la puerta a sanciones administrativas si hay problemas. Y pueden ser de varios tipos: por una actividad incorrecta, por no tener un seguro adecuado a la actividad declarada o por cuestiones de Prevención de Riesgos Laborales. Aunque sea la consecuencia de un malentendido, lo mejor es evitarlas teniendo correctamente asignada la actividad. Las sanciones administrativas no dejan de ser un gasto evitable si se notifica correctamente la información.
3. Contratiempos para acceder a subvenciones
Finalmente, una sanción o una identificación incorrecta te puede traer problemas a la hora de acceder a subvenciones y ayudas. Esto puede traer consecuencias prácticas para la viabilidad de una empresa, sobre todo si necesita financiación o actualizar procesos. No es un problema a corto plazo a veces, pero sí a medio y largo. La realidad es que muchos pequeños autónomos solo son conscientes de la magnitud de esta dificultad cuando se la encuentran.
4. Dificultades en la cotización y el pago de impuestos
Una clasificación incorrecta en el CNAE-25 te puede suponer problemas en las bases de cotización; o pagarás más o pagarás menos y eso, después, te lo pueden reclamar. Otra de las posibilidades es que los impuestos que te toque pagar (municipales, autonómicos o estatales) no estén ajustados a tu actividad real. A la larga, tener desactualizado este punto es sinónimo de complicaciones en trámites administrativos.
En consecuencia...
Actualizar el CNAE-25 ante la Seguridad Social es ineludible. En Asesoría Orihuela Coste estamos especializados en un servicio de asesoría para autónomos. Te hacemos la vida más fácil, contáctanos sin compromiso y te informamos.
